Pese a que el 31 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que tres funcionarios de Petróleos Mexicanos presuntamente involucrados en el esquema de desvío de recursos públicos conocido como “La Estafa Maestra” serían removidos de sus cargos porque “no podía tolerar nada relacionado con corrupción”; los directivos mantuvieron sus cargos, hasta el pasado 11 de abril, cuando fueron oficialmente suspendidos.
De acuerdo con el portal de transparencia se les mantuvo en la nómina hasta entonces, aunque ellos sostienen que no han cobrado salario y fueron ellos mismos quienes solicitaron su separación del cargo sin goce de sueldo.
Se trata de Miguel Ángel Lozada Aguilar, titular de Pemex Producción y Exploración; Héctor Salvador Salgado Castro, subdirector de Coordinación Operativa y Comercial de Pemex-PEP y Luis Galván Arcos, gerente de Operación y Control Financiero, Procesos Industriales y Logística.
De hecho, Héctor Salgado Castro siguió operando como subdirector de Aseguramiento Tecnológico, así lo muestra información de el 4 de abril pasado, información obtenida por el medio de comunicación Animal Político.
Con un sueldo superior a los 100 mil pesos quincenales, se solicitó a Pemex un comprobante de la suspensión de pagos, pero no hubo respuesta.
Tras comprobar que habían firmado convenios entre Pemex y universidades del sureste, cuyos recursos terminaron desviados en empresas fantasma, se solicitó su separación inmediata del cargo.
“Vamos a pedirles a estos servidores públicos que dejen sus cargos y que se termine la investigación que está en curso porque no podemos nosotros tolerar nada que tenga que ver con corrupción, ni siquiera aceptar sospechas”, dijo el presidente.
No obstante, los funcionarios continuaron prolongaron el cobro de su sueldo por casi dos meses y medio más.
Con información de Animal Político
