Las últimas semanas dejan un hedor a muerte imposible de ocultar.
En un tiempo récord, Jalisco a pasado a ser primera plana nacional por sus muertos y desapariciones.
En el último mes, (15 de septiembre) desde que se destapó el escándalo de los “tráileres de la muerte”, que contenían 444 cuerpos sin identificar, apilados unos sobre otros; contrario a ser un alto a la violencia, los muertos han incrementado de manera alarmante.
Ni el guión de la película más escalofriante, podría retratar el horror que los jaliscienses estamos viviendo.
Tráileres con cadáveres deambulando por la ciudad y fosas clandestinas con cantidades preocupantes, son el retrato de una sociedad descompuesta y el resultado de las omisiones de un gobierno.
“Vienen días complicados. No les miento. La ola de violencia no se va a terminar. Lo que sí podemos y estamos obligados, y lo que vamos a hacer es contener, dejar la piel en el esfuerzo, de impedir que esta crisis sacuda nuestra Entidad”.
Estas fueron las palabras que Aristóteles Sandoval pronunció en un discurso hace siete meses, evidentemente las palabras se quedaron en eso, en promesas sin cumplir.
Ni la violencia ha cesado, muy por el contrario, ha incrementado; ni las autoridades han trabajado para mejorar la situación, ejemplo de ello es la Fiscalía General del Estado, que sigue rebasada por la cantidad de trabajo y la lentitud de sus procesos.
Tan sólo este fin de semana se registraron 13 personas asesinadas en diferentes hechos violentos en la Zona Metropolitana de Guadalajara. Esto sin contar las tres fosas clandestinas encontradas ayer lunes en un predio de la colonia Agua Escondida del municipio de Tonalá, que hasta el momento suman 18 cuerpos, entre ellos dos mujeres.
Expertos aseguran que este nuevo pico de violencia tiene raíz en la negligencia por parte de las instituciones, encabezadas por el gobernador.
“No dejemos de alzar la voz. Si la violencia se normaliza, habremos perdido la batalla. Y es momento de invitar a todos en sus escuelas, padres de familia, organizar a la sociedad y desde aquí decirle a los jóvenes, a los que creyeron que esa es la puerta más fácil de salida, a los que creen que esa es la ruta para vivir mejor, que se están equivocando, que muy pronto van a terminar mal” sentenció en Sandoval Díaz en el mismo discurso citado anteriormente.
En medio de la peor crisis de inseguridad que ha vivido el estado, los ciudadanos nos quedamos varados en lo que se traduce a las últimas semanas de gobierno de una administración fallida; tiempo en el que tendremos que continuar siendo testigos del escenario más macabro que jamás hubiéramos podido imaginar.
Esto representa una opinión del medio basado en información de El Informador