Las plataformas digitales extranjeras que operan en México deberán pagar el IVA impuesto en nuestro país, así lo propone una iniciativa presentada por Morena.
El diputado de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar propone diversas modificaciones a la Ley del IVA y al Código Fiscal de la Federación (CFF) para que toda prestación de servicios a través de una plataforma digital cause IVA en territorio nacional.
La propuesta surge del convenio de colaboración con la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) para que paguen impuestos empresas como Netflix, Spotify, Uber, Cabify, Didi, repartidoras de comida como Sin Delantal y de hospedaje como Airbnb, así como las de entretenimiento.
Para ello, se pone a consideración de la Cámara un mecanismo de retención, el cual recae, en principio, en las personas físicas o morales que reciban los servicios.
Se establece que las instituciones financieras sean responsables solidarias de recaudar el gravamen.
Prevé una opción para que los residentes en el extranjero que prestan servicios en territorio nacional a través de dichas plataformas puedan pagar el IVA correspondiente, cuando cumplan los requisitos del Servicio de Administración Tributaria (SAT) para ello, en cuyo caso no les aplicará la retención.
Otra iniciativa que también está en San Lázaro es la del diputado Ignacio Campos, de Morena, quien presentó un proyecto para regular el comercio electrónico.
A diferencia de la iniciativa de Ramírez Cuéllar, ésta prevé modificaciones además de la Ley del IVA, a la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y de la Ley Federal de Competencia Económica.
Tiene como fin fiscalizar el comercio electrónico, cuidando que no se transfiera a consumidores.
Pone de manifiesto que el SAT no cobra impuestos a estas empresas extranjeras dedicadas al comercio electrónico, como el ISR, porque el gravamen aplica a residentes fiscales y dichas plataformas no están establecidas en México.
Incluso denuncia que no sólo se trata de un problema de recaudación sino de evasión, ya que algunas operaciones están escapando de la tributación efectiva del IVA por facturación falsa o un registro menor al real en las compras.
GOLPE A LA CLASE MEDIA
Si AMLO ha comprometido que no habrá en 2020 nuevos impuestos ni aumento de los actuales y sabemos que la recaudación fiscal cayó 2.7% durante el primer semestre de 2019 (algo así como 89 mil millones de pesos por debajo de lo programado), la pregunta elemental es ¿de dónde va a sacar el gobierno los 150 mil millones de pesos más que pretende captar el año entrante?
El secretario de Hacienda, Arturo Herrera ha perfilado una respuesta en el road show que inició esta semana para explicar a las corredurías los criterios generales de política económica para el año entrante, y el énfasis lo ha puesto en un ataque frontal a la evasión de impuestos y a la facturación de operaciones inexistentes. La primera incluye el decreto que elimina la condonación de impuestos (420 mil millones de pesos en diez años, es decir, 42 mil millones anuales); y la segunda diversas medidas para evitar que, por ese medio, se siga birlando al fisco 700 mil millones de pesos.
En un foro realizado el miércoles pasado por Moody´s, Herrera reconoció que el gobierno debe recaudar mejor. Y dio estos datos: México ha logrado aumentar la recaudación al equivalente del 13% del PIB, porcentaje que está todavía muy por debajo de la media en países latinoamericanos que es de 17%.
El objetivo es acercarse a esa media en 2020 y puso como meta alcanzar el 16% del PIB. Con esto, según sus cuentas, se obtendrían esos 150 mil millones de pesos adicionales para las arcas públicas.
Sin embargo, de acuerdo con un borrador de la Ley de Ingresos 2020, el gobierno va también por ajustar al alza tabuladores del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) e incorporar ese gravamen a otras actividades.
Los tabuladores aumentarían por ejemplo en vinos y tabaco, internet y otros servicios de telecomunicaciones y eventualmente la gasolina Premium. La captación del IEPS en ese combustible está estimada en 107 mil millones de pesos para este año, recursos con los que se solventará la referida caída de ingresos en el primer semestre de este año.
Pero el proyecto también considera la aplicación del IEPS a servicios prestados vía plataformas digitales. Es el caso, por ejemplo, de Uber, DiDi, Netflix y Spotify entre otros.
Por otro lado, vendrían ajustes en rubros como el derecho de trámites aduanales o el pago de derechos como el de uso aeroportuario o la expedición de pasaportes, entre otros.
Según economistas del Colmex y la UNAM, los deciles menos afectados por estos eventuales ajustes serían el 1 (los más pobres) y el 10 (los más ricos). El mayor peso recaerá en los deciles del 4 al 6 que corresponden a las clases medias, los causantes cautivos de siempre.
El grupo de asesores del secretario Herrera confirmó a este reportero que sí se promoverá una reforma fiscal pero que ésta se hará en 2022, pasadas las elecciones intermedias.
Con información de El Universal