Luego de sostener un encuentro con el Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), durante su visita a Mezquitic, en el Norte de Jalisco, el gobernador Enrique Alfaro previó que la Entidad afrontará un recorte generalizado de aproximadamente tres mil 500 millones de pesos (MDP) por parte del Gobierno federal para el ejercicio fiscal 2020.
“Desafortunadamente el Presidente nos expresó que ya la propuesta del presupuesto, al parecer, no va a tener modificaciones, lo cual es algo que lamentamos. Aunque me dijo que tuviéramos la confianza de que los temas pendientes se iban a trabajar después de (la aprobación del) Presupuesto, la verdad es que habría sido ideal que ya quedaran incluidos”.
Recordó que esa disminución de fondos es mayor a la sufrida durante 2019 (dos mil 500 MDP) y que su administración buscará paliar los efectos con “una serie de medidas y ajustes” al proyecto presupuestal para el próximo año que envió al Congreso del Estado.
Aceptó que ese panorama afectará áreas como infraestructura carretera, seguridad, salud y educación, que no se pueden sacar adelante sin la cooperación del Gobierno federal.
“No nos queda de otra más que hacer un nuevo esfuerzo, como ya lo hicimos este año. No va a haber pretextos para cumplir lo que tenemos que cumplir con los jaliscienses, pero sí creemos que es lamentable el trato que la Federación le sigue dando a Jalisco”.
Sin embargo, Alfaro dijo que hoy solicitará cambios en el presupuesto asignado para seguridad, cuando se reúna con el titular de esa cartera a nivel federal, Alfonso Durazo, y esperó que López Obrador cumpla su promesa de otorgar mayores recursos durante el transcurso del próximo año.
El titular del Ejecutivo jalisciense descartó que vaya a recurrir a contraer deudas o aumentar los impuestos para contrarrestar las medidas financieras de la Federación.
“No le vamos a cargar a la gente el maltrato del Gobierno federal a Jalisco”.
A inicios de octubre, Alfaro adelantó que se venía un recorte de mil 600 millones de pesos sólo en el sector Salud.
Al respecto, enfatizó que hay incertidumbre sobre cómo se podrá suplir la baja presupuestal y cómo se gestionará la prestación de servicios en los centros de salud afiliados al Seguro Popular, cuya desaparición fue avalada por el Senado el 14 de noviembre para ser sustituido por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Con información de El Informador
